Alarma ambiental

Deshielo en los Andes Peruanos

Con el 56% de su superficie glaciar perdida desde 1962, expertos advierten sobre la urgencia de tomar medidas ante el cambio climático y la contaminación ambiental que están causando este fenómeno.

Andes Peruanos.- El Perú se destaca por albergar la mayor cantidad de glaciares tropicales en Sudamérica y el 68% de los glaciares tropicales del mundo. Sin embargo, este privilegio se ve amenazado por el cambio climático y la contaminación ambiental, evidenciado por el rápido deshielo de nevados emblemáticos como el Huaytapallana, Huascarán y Colque Punku. La presidenta ejecutiva del Instituto Nacional de Investigación en Glaciares y Ecosistemas de Montaña (Inaigem), Beatriz Fuentealba Durand, subraya la importancia de la preocupación ante esta situación.

La pérdida del 56% de la superficie glaciar peruana entre 1962 y 2020 representa la disminución de importantes reservas de agua que anteriormente se mantenían como hielo. La información recabada en los informes realizados en 2016 y 2020 destaca la urgencia de abordar esta problemática. La representante del Inaigem, Beatriz Fuentealba, señala que aunque existen más de 2,000 glaciares en el país, los informes se centran en análisis a nivel de cordillera.

El fenómeno del deshielo, atribuido al calentamiento global, afecta especialmente a Perú debido a su ubicación cercana al Ecuador y en la zona del trópico. Fuentealba hace hincapié en la necesidad de reducir las emisiones para contrarrestar este proceso acelerado de deshielo. El Inaigem colabora con el Ministerio del Ambiente y otras entidades estatales para sensibilizar sobre el tema y tomar medidas de adaptación.

El deshielo tiene múltiples impactos, incluida la reducción de la cantidad de agua disponible, especialmente durante la época seca. El objetivo del Inaigem es promover la recuperación y gestión adecuada de los ecosistemas de alta montaña y las cabeceras de cuenca para compensar la pérdida de glaciares y almacenar agua en lagunas de formación reciente y ecosistemas saludables.

Además, el deshielo puede afectar la calidad del agua debido a procesos de contaminación natural, lo que subraya la importancia de monitorear y tomar medidas correctivas a tiempo. La formación de nuevas lagunas cerca de glaciares inestables representa un riesgo adicional, ya que podrían desencadenar avalanchas si se producen desprendimientos de hielo o roca.

Fuente: Andina


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