Política y Clima de Riesgo
María Corina Machado confiesa que temió por su vida al salir de Venezuela
Líder opositora describe peligrosa travesía rumbo al Nobel en Noruega.

Oslo.- La líder opositora venezolana María Corina Machado, recientemente galardonada con el Premio Nobel de la Paz 2025, relató que temió por su vida al abandonar Venezuela y viajar hacia Noruega, donde recibió el reconocimiento internacional. Machado ofreció declaraciones desde Oslo, en una rueda de prensa con medios en español, incluido AFP, en las que describió su salida del país como una experiencia de riesgo, espiritualidad y determinación en medio de un contexto político adverso.
Machado explicó que, durante el proceso de salida, no solo enfrentó dificultades logísticas, sino que en varios momentos sintió un peligro real para su vida, consciente de las amenazas que enfrentan los líderes opositores en Venezuela. Señaló que, en última instancia, su travesía estuvo “en manos de Dios”, una expresión de la tensión personal que implicó marcharse de un país donde ha permanecido gran parte del último año en condiciones de clandestinidad.
El relato de Machado se produce tras una compleja operación que la llevó por cielo, mar y tierra hasta Oslo. Informes de medios estadounidenses describen que su viaje incluyó desplazamientos encubiertos desde Caracas, el cruce de varios puestos de control militares, y un tramo marítimo nocturno en el mar Caribe hasta llegar a Curaçao, tras lo cual continuó su ruta hacia Noruega. Aunque Machado evita dar detalles operativos de su salida para proteger a quienes la ayudaron, reconoció que fue un trayecto arduo y peligroso.
La líder opositora ha estado en clandestinidad desde agosto de 2024, luego de las elecciones presidenciales que generaron acusaciones de fraude electoral y fueron ampliamente cuestionadas por la oposición y observadores internacionales. Desde entonces, Machado ha mantenido un perfil bajo para evitar detenciones o represalias por parte del gobierno venezolano.
Su llegada a Noruega no solo fue motivada por la recepción de su premio Nobel, sino también representó un momento de reencuentro con su familia, a quienes no había visto durante un largo periodo debido a su situación de seguridad. La entrega del galardón fue presidida por su hija, Ana Corina Sosa, quien aceptó el premio en su nombre en una ceremonia marcada por un ambiente de reconocimiento y apoyo político.
La declaración de Machado sobre su temor por la vida subraya los desafíos que enfrentan los líderes democráticos en Venezuela bajo la administración del presidente Nicolás Maduro, en medio de tensiones políticas internas y presión internacional por la defensa de los derechos humanos. Su experiencia personal y su lucha por la democracia han sido elementos centrales de su discurso político, incluso en el contexto de su ausencia física del país.
En Oslo, además de hablar sobre su salida, Machado ha enviado mensajes esperanzadores a la comunidad internacional y al pueblo venezolano, instando a continuar la búsqueda de libertad, democracia y respeto por los derechos fundamentales. Su testimonio no solo remarca los riesgos personales que enfrentan los opositores, sino también la resiliencia política que la ha caracterizado a lo largo de años de confrontación con el régimen.
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