Electores en suspenso

Casi la mitad aún no define su presidente

Sondeo de CPI muestra intención dispersa y fuerte bloque de blancos, viciados e indecisos urbanos.

Fuente Fotográfica: Internet

Perú.- A poco más de cuatro meses de las Elecciones Generales de 2026, el panorama presidencial sigue abierto y fragmentado. La última encuesta nacional urbana de CPI, presentada en exclusiva por RPP, muestra que ningún candidato despega con claridad y que el grupo de peruanos que no tiene definido su voto o planea anularlo se ha convertido en el verdadero “bloque mayoritario” del escenario electoral.

De acuerdo con el estudio, el exalcalde de Lima Rafael López Aliaga, líder de Renovación Popular, encabeza la intención de voto con 12,5 % de las preferencias a nivel nacional urbano. Se mantiene así en primer lugar, aunque prácticamente estancado frente a la medición de inicios de noviembre, cuando marcó 12,7 %.

En segundo lugar aparece Keiko Fujimori, de Fuerza Popular, quien en su cuarto intento por llegar a la presidencia suma 7,6 %. Le sigue Mario Vizcarra, hermano del encarcelado expresidente Martín Vizcarra, con 6,7 % de respaldo, ubicándose en la tercera posición del sondeo. El cuarto lugar es para el cómico Carlos Álvarez, que registra 4,2 % de intención de voto. Más atrás se sitúan César Acuña, de Alianza para el Progreso (APP), con 2,8 %, y José Luna Gálvez, de Podemos Perú, con 2,1 %.

La encuesta también incorpora a otras figuras que empiezan a asomar en la competencia. Por primera vez aparece el periodista y exconductor de televisión Carlos Espá, del partido Sí Creo, con 2,0 %. Le siguen Alfonso López Chau (Ahora Nación), con 1,8 %; el exalcalde George Forsyth (Somos Perú), con 1,4 %; el exministro Fernando Olivera (Frente de la Esperanza), también con 1,4 %; y el comunicador Philip Butters (Avanza País), con 1,1 %. El rubro “otros candidatos” agrupa un 6,4 % de las preferencias.

Pero el dato más contundente no está en los nombres, sino en la ausencia de decisión. CPI registra que 19,2 % de los consultados afirma que votaría en blanco, viciado o que no acudiría a votar; y un 30,7 % declara que todavía no tiene definido su voto para la próxima elección presidencial. En conjunto, este bloque suma 49,9 % del electorado urbano encuestado: casi la mitad de los potenciales votantes.

Este casi 50 % de ciudadanos sin opción clara refleja un clima de desconfianza y cansancio con la política, pero también un margen de maniobra enorme para las campañas. En otras palabras, las posiciones actuales son una fotografía de intención de voto temprana, más que un mapa definitivo de lo que ocurrirá en las urnas. Cualquier candidatura que logre conectar con ese electorado distante, ofrecer certidumbre y diferenciarse de la oferta tradicional podría crecer con rapidez en los próximos meses.

La ficha técnica del estudio precisa que la muestra es de 1 200 personas pertenecientes a la población urbana, hombres y mujeres de 18 a 70 años. La técnica empleada fue la encuesta presencial en los hogares muestreados, aplicada entre el 26 y el 30 de noviembre de 2025. El nivel de confianza es de 95,5 % y el margen de error es de ± 2,8 puntos porcentuales.

Con este escenario, el arranque formal de la campaña presidencial se dará en un país donde el candidato que hoy lidera no supera el 13 % y donde la mitad de los encuestados, simplemente, aún no elige a nadie. El verdadero pulso de la contienda, sugiere la encuesta, se jugará precisamente en ese enorme segmento de indecisos, blancos y viciados que, por ahora, miran el proceso desde la distancia.

Fuente: RPP

 


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